Aditivos para diésel

A medida que la tecnología de los motores diésel ha ido evolucionando, también lo han hecho los requisitos de combustibles diésel de alta calidad que soporten las rigurosas exigencias de los motores modernos y proporcionen un excelente rendimiento, par  y ahorro de combustible. La necesidad de reducir las emisiones de los vehículos ha dado lugar a la exigencia de un combustible diésel bajo en azufre. Como consecuencia, el diésel ha perdido gran parte de su lubricidad natural, lo que ha llevado a la necesidad de utilizar complejos y sofisticados paquetes de aditivos para garantizar un mejor rendimiento.

 

Aunque la introducción del diésel de bajo contenido en azufre ha sido un éxito, hay que tener en cuenta algunas cuestiones, especialmente en lo que respecta a los vehículos más antiguos. Los aditivos para diésel del mercado secundario, aplicados correctamente, ayudan a contrarrestar estos problemas.

 

Combustible ULS

 

El diésel ULS, o más correctamente el diésel de ultra bajo azufre, tiene sólo 15 ppm de azufre. Este bajo contenido de azufre reduce las emisiones y requiere el uso de filtros de partículas que eliminan las partículas de los gases de escape.

 

Un efecto secundario del bajo contenido de azufre es la reducción de la lubricidad natural del diésel, así como de su conductividad eléctrica. Otro problema es que el combustible ULS tiene una mayor afinidad por el agua, lo que conlleva el riesgo de que se acumule humedad en el depósito de combustible, que puede provocar corrosión y el crecimiento de organismos biológicos. Hasta cierto punto, estos problemas se solucionan con los paquetes de aditivos hasta el punto de que el combustible ULS puede utilizarse con seguridad en prácticamente todos los vehículos.

 

Problemas relacionados con el diésel

 

Aparte de la acumulación de humedad y los riesgos asociados de corrosión y crecimiento de algas, hay otros problemas que afectan a los vehículos, especialmente si funcionan en condiciones difíciles. Estas condiciones incluyen la conducción "stop-start", el funcionamiento a altas temperaturas y el uso de combustible contaminado.

 

Se acumulan pequeños depósitos insolubles en el sistema de combustible, en los inyectores, en las válvulas y en la cámara de combustión. Con el tiempo, los inyectores, que funcionan a presiones extremadamente altas y tienen boquillas excepcionalmente finas, se obstruyen con estos depósitos, y el rendimiento y el ahorro de combustible se ven afectados. Otro problema que se ha notificado desde la introducción del combustible ULS es un aumento de la aparición de obstrucciones en los filtros debido a la disminución del rendimiento del diésel ULS en climas fríos.

 

Cómo ayudan los aditivos

 

Los paquetes de aditivos están diseñados para contrarrestar casi todos estos efectos. Estos aditivos incluyen:

 

- Lubricidad: para mejorar las propiedades de lubricación

- Conductividad: para evitar la acumulación de estática

- Depresores del punto de turbidez y de fluidez: para reducir las temperaturas en las que se forman los cristales de cera y evitar que el combustible fluya

- Biocidas: para eliminar y prevenir el crecimiento microbiano

- Estabilizadores: para permitir un almacenamiento más prolongado

 

Las excepciones notables a esta lista son los dispersantes de agua, ya que suelen causar más problemas de los que resuelven, y los detergentes que evitan la acumulación de hollín y depósitos. Mientras que la acumulación de humedad se evitará con el drenaje regular del filtro de combustible, es posible que se necesiten aditivos posventa para solucionar otros problemas.

 

Aditivos BIZOL

 

BIZOL es un fabricante alemán de lubricantes y aditivos con muchos años de experiencia. BIZOL tiene una experiencia particular en la tecnología de motores diésel debido al alto porcentaje de vehículos con motor diésel que se venden en Europa.

 

Reconociendo que los fabricantes de combustible no pueden satisfacer todas las necesidades posibles de aditivos, BIZOL ha lanzado el BIZOL Diesel Additive, que proporciona una mayor protección al motor. En concreto, contiene detergentes que ayudan a limpiar los sistemas de inyección de combustible restaurando la potencia y la economía, además de un potente antioxidante para combatir la corrosión causada por la humedad. El aditivo mejora la lubricidad del combustible, reduce las emisiones gracias a su capacidad para eliminar las acumulaciones y los depósitos de los inyectores de combustible, y mejora el rendimiento del arranque.

 

Un segundo aditivo, BIZOL Diesel-Antigel, mantiene la fluidez del diésel ULS hasta 31 grados centígrados bajo cero o 24ºF, evitando la formación de cera y los problemas de arranque en tiempo frío.

 

BIZOL prolonga la vida de los motores diésel

 

Los aditivos para combustible diésel prolongan la vida del motor, reducen los costes y protegen el medio ambiente. Este innovador aditivo es ideal para los entusiastas que quieren asegurarse de que sus motores diésel estén siempre en condiciones óptimas.